Esta escena de la película “Único Testigo” me parece impresionante. Un grupo de amish construye un granero un domingo como hoy, para ayudar a un vecino que se acaba de casar. John Book (Harrison Ford) que no es amish y que está allí circunstancialmente les ayuda. La música es de Maurice Jarre.
Al margen de la historia que cuenta la película, que consiste en que un policía (Harrison Ford) intenta proteger a un niño testigo de un asesinato (Lukas Haas) y su madre viuda (Kelly McGillis) de unos policías corruptos, lo que llama la atención de esta película es que nos presenta a los amish, de los que he de reconocer que antes de verla (hace ya unos años) ni había oído hablar. Después tampoco es que haya oído demasiado, seamos sinceros. Son gente más bien discreta.
Estos amish son descendientes de emigrantes del sur de Alemania y Suiza que se instalaron principalmente en Pennsylvania, en el Condado de Lancaster. Como muchos grupos protestantes les caracteriza su anabaptismo, que consiste en no dar validez al bautismo de los niños pequeños, porque no son conscientes de lo que hacen. Solo llegada una cierta edad y voluntariamente se hace un bautismo público. La cosa tiene su lógica la verdad, pero bueno, tampoco vamos a entrar en debates teológicos que es domingo y hemos dormido poco.
A lo que ibamos, dentro de estos grupos protestantes en el siglo XVI surgieron los menonitas (que deben su nombre al sacerdote holandés Menno Simons) y un tiempo después los amish fueron una escisión digamos estricta y tradicionalista de los menonitas, creada por Jacob Amman a finales del siglo XVII. Dentro de la masiva inmigración a Estados Unidos de ese siglo se instalaron en diversos estados de la Unión, principalmente en Indiana, Ohio y Pennsylvania. Lancaster en concreto está bastante cerca de Philadelphia, se puede ver en el mapa.
Su rechazo a muchas comodidades modernas como los coches, la televisión o equipos de música, puede parecer un poco absurdo. Eso de renunciar voluntariamente a cosas que facilitan la vida diaria es bastante "chocante" y uno podría imaginar que lo hacen por temor a la influencia del maligno en un simple DVD, pero parece ser que lo hacen más bien para mantenerse aislados del resto del mundo, especialmente de los "ingleses", que es como llaman a los americanos no-amish. Dentro del conjunto de amish los hay más o menos estrictos porque algunos incluso tienen páginas web www.padutchcountry.com y www.800padutch.com donde se puede averiguar más sobre este grupo religioso y cultural. Tienen hasta merchandising (ojo con la Visa!)
Hablan un idioma que es una variante arcaica del alemán, al que llaman Deitsch y luego tienen tradiciones como las que se ven en la película, visten como granjeros del siglo XVII y los hombres casados se dejan largas barbas.
Para acabar, entre lo que he leído destaca sobre todo el sentido comunitario y cooperativo que tienen, casi como un kibbutz israelí. Como viven relativamente aislados y desconfían del mundo exterior se apoyan entre ellos para salir adelante, tal como vemos en la escena de la película. No utilizan la Seguridad Social americana (si es que existe como tal, que esa es otra...) y hay cada vez más grupos amish que "caen" en la tentación de ciertas comodidades como los coches o la "electricidad". Parece ser que actualmente hay unos 200.000 amish en todo Estados Unidos.
Pues nada, la nota religiosa dominical.
Curiosidad: en un momento de la escena camino del granero le preguntan a John Book (Harrison Ford) si sabe de carpintería y dice "de eso hace ya mucho tiempo". En la vida real Harrison Ford era carpintero hasta que George Lucas le dio un papel en American Graffitti.
Otro día buscaré por ahí músicas de las pelis de Peter Weir, que suele tener muy buen ojo con los temas. En esta en concreto además de las composiciones de Maurice Jarre, está muy bien la escena del granero donde Harrison Ford baila con Kelly McGillis la canción de Sam Cooke "Wonderful World" que suena en la radio del coche estropeado. Gran canción y gran escena.
2 comentarios:
querida low le agradezco sus piropos y sepa usted que me ruborizan. ahora que ha acabado el mundial de futbol habrá menos cosas relacionadas con eso. las notas religiosas son los domingos, es el día de más paz (y resaca!)
PD: en agosto empieza el mundial de baloncesto.
Por primera vez veo la pelicula una recomendacion de mi novio y la verdad estoy encantada que gran pelicula ,la mùsica , el vestuario y sobretodo las actuaciones , ademas del gran ejemplo que deja la escena de la construcciòn de la granja que union.
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