Walter Raleigh-¿Se imagina lo que significa cruzar un océano? Durante semanas se ve el horizonte perfecto y vacío. Se vive con temor. Temor a las tromentas. Temor a la enfermedad a bordo. Temor a la inmensidad... Hay que enterrar ese miedo en lo profundo de sí. Estudiar los mapas. Observar la brújula. Rezar para que haya viento. Y tener esperanza, una pura, limpia, frágil esperanza. Al principio, sólo hay neblina en el horizonte. Uno observa, se observa. Después se ve una mancha, una sombra lejana en el agua, durante el día, durante un día más. La mancha se expande lentamente y toma forma, hasta que al tercer día, uno cree, uno se atreve a decir la palabra: Tierra. Tierra. Vida. Resurrección. La verdadera aventura. Surgiendo de lo desconocido, de la inmensidad a al nueva vida.. Eso, Su Majestad, es el Nuevo Mundo.
Isabel I- Me gustan sus inmensidades. Su océano es una imagen de eternidad. Esos espacios nos empequeñecen. ¿Descubrimos nosotros al Nuevo Mundo, Sr. Raleigh, o él nos descubre a nosotros?
Walter Raleigh-Habla como un verdadero explorador.
En la película Elizabeth.
La música apropiada de Piratas del Caribe...
2 comentarios:
parece q no esperas que entre mucha gente en el blog este fin de semana jjejej
será muy interesante, pero qué es??jajajaa. Ante esto, sólo queda una cosa hoy!!
a veces hasta hay reyes que parecen estadistas ...
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